sábado, 31 de marzo de 2012

TIEMPOS DE ZOZOBRA Y ESPERANZA


Las calles de todo el Estado español fueron el pasado 29 de marzo, en una jornada de HUELGA GENERAL, un clamor colectivo y solidario contra la Reforma laboral impuesta por el PP y que supone el más GRAVE ATENTADO contra las conquistas sociales en toda la historia de nuestra democracia.
A pesar del mensaje acopalítico del poder y de sus secuaces mediáticos, a pesar de difundir e infundir el miedo, conocedores de que es una arma poderosísima de desmovilización y sumisión, una gran cantidad de ciudadanas y ciudadanos demostraron que NO ESTAN DISPUESTOS a que este gobierno devaste con su política neoliberal el Estado de bienestar que tantos esfuerzos costó soñar y conseguir.

Me ha parecido muy interesante, en cuanto a conclusiones para el día de después, este artículo de Joan Herrera, Secretario General de ICV, que ha aparecido en Público.es


Pasada la huelga general debemos preguntarnos qué estaba en juego el 29M. Una huelga que hace apenas unos días era vista como el último acto de resistencia ante el poder absoluto de la derecha y del PP. Una huelga que fue presentada como una moción de confianza a los sindicatos, y no como lo que era, una moción de censura ante la política de recortes y contrarreforma. Una huelga que ha tenido que superar el miedo a que te acaben despidiendo o degradando tus condiciones –más aún después de la reforma–; con un escasísimo acompañamiento mediático; y en contra de los mensajes de inutilidad de todos los gobiernos –el europeo, el español o el catalán. Y a pesar de todo ello, la huelga tuvo un seguimiento masivo, con movilizaciones multitudinarias, lanzando el mensaje que el miedo no nos había noqueado, un mensaje a nuestros respectivos gobiernos, a Europa y a los mercados.

Lo más positivo de la jornada es que abre un nuevo escenario. Cuando algunos pensaban, tan sólo hace una semana, que tendrían una alfombra roja para entrar hasta el fondo en el desmantelamiento de nuestros derechos, se han encontrado con dos actos de resistencia. El primero en las urnas de Asturias y de Andalucía. El segundo en las calles. El 29M, por tanto, dibuja un nuevo escenario, en el que la movilización social adquiere más fuerza. Una movilización que ha necesitado sumar todas las fuerzas, que ha partido de una imprescindible convocatoria sindical, pero que ha conseguido convertirse en una huelga social y ciudadana. Si queremos responder al desafío que supone un recorte de derechos sin precedentes, deberemos entender que hay que caminar juntos, desde diferentes expresiones sociales, sindicales y políticas, siendo esta la única manera de responder. Y que para caminar juntos necesitamos de nuevos instrumentos que nos permitan plantar cara, pero no solo eso, sino construir propuestas, y un discurso que desmonte el argumento de la inevitabilidad de sus políticas.

En segundo lugar, el nuevo escenario interpela claramente a los gobiernos para que cambien sus políticas. Y para hacerlo lo primero que tienen que hacer es entender que hay un país, una sociedad con la que hay que interlocutar. Que hay propuestas que hay que valorar. Hasta el momento las derechas, PP y CiU, han ejercido sus mayorías sin complejos, y en algunos sin principios. Han recortado derechos después de eliminar impuestos, como es el caso de Catalunya, y no han tenido ningún rubor al aprobar medidas que habían negado que las pudiesen llevar a la práctica. Pero tras el 29M creo que pueden empezar a entender que si continúan gobernando igual, la respuesta será la de una movilización social que no es que deba articularse, sino que ha demostrado que puede articularse.

Seguramente entraremos en una espiral en la que se intentará tapar el éxito de la huelga con el debate sobre la violencia, haciendo que el enfoque sea en torno a las políticas de interior, y no en torno a las políticas laborales, sociales y económicas. Precisamente para evitarlo, creo que es importante, muy importante, entender, como escribía Jordi Armadans, de la Fundación por La Paz, que erróneamente se suele creer que la violencia, a pesar de ser poco ética, es una forma efectiva y útil de plantear las reivindicaciones y defender unos intereses determinados. En contraste, se suele considerar que la no-violencia es poco práctica y útil. Y bien, después de los incidentes ocurridos en Barcelona por la huelga general, una vez más, vemos que esto es falso: la violencia de unos pocos ha hecho que a la calle y a los medios de comunicación se hablara más de los incidentes que no de la dureza de una reforma laboral que, en un contexto de recortes, se lleva derechos sociales básicos. Y es que la violencia no es solo poco ética, es inútil y poco efectiva.

sábado, 24 de marzo de 2012

¡VIVA LA PEPA!





Manuel Rivas
firma este artículo publicado hoy en El País. Lo ha titulado Decálogo y yo quiero reivindicar con él el espíritu de lucha por la felicidad del pueblo.
Nunca nos han regalado nada. El pueblo ha conquistado todos y cada uno de los avances hacia una sociedad mejor, más humana y más justa. La historia nos ha colocado ante la necesidad urgente de defender esas conquistas.
Os dejo con Manuel Rivas y con la Pepa.

Lástima de artículo. Ya estaba en su sitio, pero alguien ha venido y lo han sustituido por una esquela, y las esquelas tienen absoluta preferencia. Se pagan al contado. “¡Los muertos, en cash!, dice el administrador, con sonrisa pícara y repicando en la mesa con los nudillos. Era una crítica a la apropiación del primer centenario de la Constitución de 1812. A la pobre Pepa, toda la vida exiliada, desdeñada, ridiculizada porque se atrevía a hablar de “felicidad” para el pueblo, y ahora la sacan de momia en una “fiesta de fajines, bastones y levitas”, en plena reacción, que decía el artículo republicano. Soy aprendiz de tipógrafo y un día me gustaría ser como Juan José Morato, que empezó también en esta profesión y ahora compone, por decirlo así, sus propias letras. Y la gente las devora. Al escritor obrero, hijo de lavandera y zapatero, se lo disputan los grandes periódicos. Las crónicas sobre la Asturias minera, publicadas en El Heraldo de Madrid, son de nota, para coleccionar. Yo de Morato me leo todo, aunque sea en un periódico burgués. Pero lo que llevo en el bolsillo de la chaqueta es el Decálogo que publicó en El Calendario del Obrero, en 1909. Cada vez que lo leo me suena al mejor herrero golpeando con el martillo en el yunque: 1. Instruirse y combatir la ignorancia. 2. Acortar las horas de trabajo. 3. Elevar los salarios. 4. Tener independencia y odiar la vileza. 5. Ser viril y destruir la tiranía. 6. Establecer la fraternidad y despreciar el egoísmo. 7. Conquistar derechos y abolir injusticias. 8. Humanizar el trabajo. 9. Llevar cariño y alegría al hogar. Y 10. Fundar un mundo mejor.
Hasta aquí los mandamientos. Hay rumores de que el 29 hay una huelga. A ver si el próximo centenario, en el 2012, hemos acabado por lo menos con la ignorancia y la vileza. ¡Y viva la Pepa libre!

sábado, 28 de enero de 2012

FRANCISCA AGUIRRE, PREMIO NACIONAL DE POESÍA 2011


Una poetisa alicantina ha sido galardonada con el Premio Nacional de Poesía 2011.
Ojalá que este galardón sirva para difundir de forma contundente la voz de esta mujer que, como tantas otras y, por el hecho de serlo, aparece relegada al eterno segundo plano de la literatura escrita por mujeres.


Os invito a leer una crítica sobre Historia de una anatomía,la obra premiada. Está escrita por Manuel Rico y se publicó en El País el 8 de enero de 2011.

Francisca Aguirre (Alicante, 1930) es una poeta lateral de la generación del medio siglo. Y tardía respecto a sus coetáneos en la publicación de su primer libro, ya que Ítaca data de 1971. El conjunto de su obra, que en buena medida descansa en la memoria y en una mirada ácida y tierna a la vez sobre los años de nuestra posguerra, tiene el extraño equilibrio que aporta la mezcla de un lirismo intenso y una expresión directa, conversacional. Es además una poesía de raíz existencialista y apegada a lo cotidiano. Aguirre, que en su libro anterior, Nana para dormir desperdicios (2007), había situado en el centro de sus preocupaciones los recuerdos de infancia y menesterosidad bajo el primer franquismo, opta en Historia de una anatomía por desnudarse, por indagar en los ingredientes, reales e imaginarios, que conforman una biografía. Se trata de un diálogo sereno y lúcido, en el que la ternura acompaña a la introspección y en el que juega un papel esencial el distanciamiento a través de la ironía. El libro, que se abre con una cita de Coetzee ("Un cuerpo dice la verdad"), es un recorrido por los espacios físicos (las manos, la boca, el pelo, la piel), psíquicos (la memoria, la voluntad, los sueños) y por los sentidos que conforman la subjetividad de un ser humano. Sólo en los últimos poemas (en el apartado titulado 'Anamnesis') incorpora elementos ajenos, nos muestra indicios del otro, de los otros, de quien está al otro lado de la "anatomía". La poesía de Francisca Aguirre ha ido, con el paso del tiempo, reforzando el tono conversacional de sus primeros libros -especialmente de Los trescientos escalones (1977)-, despojándose de todo artificio y reforzando su expresión más clara, en algunos momentos próxima a lo naíf, lo que acerca su verso a algunos de los poetas de la generación del 50 que cultivaron un lenguaje directo, casi coloquial (Ángel González, Sahagún, Cabañero). El verso libre, el uso de la comparación en apariencia sencilla pero inteligente y polisémica, los encabalgamientos y quiebros que pone en juego dan lugar a una lírica de confesión serena, para leer en voz baja, como invitando a un diálogo íntimo.
Y, cómo no, tres de sus poemas, uno de ellos, el tercero, perteneciente a Historia de una anatomía.

Hace tiempo
Recuerdo que una vez, cuando era niña,
me pareció que el mundo era un desierto.
Los pájaros nos habían abandonado para siempre:
las estrellas no tenían sentido,
y el mar no estaba ya en su sitio,
como si todo hubiera sido un sueño equivocado.
Sé que una vez, cuando era niña,
el mundo fue una tumba, un enorme agujero,
un socavón que se tragó a la vida,
un embudo por el que huyó el futuro.
Es cierto que una vez, allá, en la infancia,
oí el silencio como un grito de arena.
Se callaron las almas, los ríos y mis sienes,
se me calló la sangre, como si de improviso,
sin entender por qué, me hubiesen apagado.
Y el mundo ya no estaba, sólo quedaba yo:
un asombro tan triste como la triste muerte,
una extrañeza rara, húmeda, pegajosa.
Y un odio lacerante, una rabia homicida
que, paciente, ascendía hasta el pecho,
llegaba hasta los dientes haciéndolos crujir.
Es verdad, fue hace tiempo, cuando todo empezaba,
cuando el mundo tenía la dimensión de un hombre,
y yo estaba segura de que un día mi padre volvería
y mientras él cantaba ante su caballete
se quedarían quietos los barcos en el puerto
y la luna saldría con su cara de nata.
Pero no volvió nunca.
Sólo quedan sus cuadros,
sus paisajes, sus barcas,
la luz mediterránea que había en sus pinceles
y una niña que espera en un muelle lejano
y una mujer que sabe que los muertos no mueren.


Última nieve
A Pedro García Domínguez
Una hermosa mentira te acompaña,
pero no llega a acariciarte.
Sólo sabes de ella lo que dicen,
lo que te explican libros enigmáticos
que narran una historia fabulosa
con las palabras llenas de significación,
llenas de claridad y peso exactos,
y que tú no comprendes sin embargo.
Pero tu fe te salva, te mantiene.
Una hermosa mentira te vigila,
aunque no puede verte, y tú lo sabes.
Lo sabes de esa forma inexplicable
en que sabemos lo que más nos hiere.
Llueve desde los cielos tiempo y sombra,
llueve inocencia y loco desconsuelo.
Un incendio de sombras te ilumina,
mientras la nieve apaga las estrellas
que una vez fueron permanentes ascuas.
Una hermosa mentira te acompaña;
a infinitos millones de años luz,
intacta y compasiva, se extiende la nevada.

Las manos
Pensamos porque tenemos manos
Anaxágoras
Me ha costado muchísimo educarlas
y no estoy muy segura de haberlo conseguido
porque la mayor parte de las veces
actúan por su cuenta se disparan
es como si tuvieran vida propia.
Algunas veces he pensado que solapadamente
sin darle cuenta a nadie
es decir sin decírmelo a mí
que al fin y al cabo soy su dueña
estas dos lagartijas estas aficionadas al tanteo
han conseguido nadie sabe cómo
elaborar una Constitución y no contentas con eso
han llevado adelante un Estatuto
lo que supone para mí un auténtico caos.
Porque no hay forma de poner de acuerdo
a estas dos desgraciadas a estas dos inconscientes
que se pasan la vida peleando
defendiendo con verdadera saña sus derechos:
la solidaridad insobornable de la izquierda
el orden la cordura y el respeto que para sí reclama la derecha.
Mientras el cuerpo el miserable cuerpo del que viven:
el tronco las axilas los brazos y los antebrazos las muñecas
no encuentran la manera de aplacarlas
de hacerles entender que si se empeñan
esto va a terminar en un entierro.
Que lo mejor sería que empezaran
a sacarle provecho a la distancia
al espacio que las separa equitativo
y a disfrutar del ritmo que produce
unirse de improviso una con otra
y jalear alegremente el hecho sorprendente y audaz
de que por fin la vida nos acerque aunque sea tan sólo
de manera fugaz como era de esperar.

domingo, 18 de diciembre de 2011

ANA JUAN, PREMIO NACIONAL DE ILUSTRACIÓN 2010

Me resultan extraordinariamente atractivas las propuestas de esta ilustradora, que crea un universo visual de un gran poder de sugerencia, exquisito, sensual y, al menos en lo que yo conozco, comprometido con estados ánimicos que van de la página a la espectadora emocionando, retando a través de una mirada muy personal. En la actualidad, una exposición suya en Madrid nos permite acercarnos a su obra y, a buen seguro, dejarnos atrapar por la capacidad de seducción de su arte.



LA CAJA SECRETA DE SNOWHITE
30 NOV 2011 - 15 ENE 2012


El Museo ABC presenta la exposición La caja secreta de Snowhite basada en el libro homónimo de Ana Juan. La autora adapta libremente el cuento Blancanieves de los hermanos Grimm en Snowhite (Ediciones de Ponent, 2001) y en La Caja Secreta de Snowhite (No Time, 2010).

En 2010, Ana Juan funda junto a Manolo Gordillo la editorial No Time cuyo primer proyecto es la recopilación de todos los diseños e ideas que habían sido el germen del libro Snowhite para producir La caja secreta de Snowhite. Una caja de madera de edición limitada que contiene objetos personales de la protagonista y un cuaderno de bocetos donde se puede seguir el proceso creativo del libro. En ellos, la artista recupera el espíritu narrativo primigenio y relata una historia cruel basada en unos personajes profundamente malvados. La madrastra es retorcida y desconfiada, los enanos son unos empresarios déspotas y el príncipe se beneficia vilmente de la soledad de la protagonista. Ana Juan indaga en el territorio de lo ominoso, cuestionando el mensaje del cuento original, para alzar una manifestación sobre la soledad de la mujer y la incapacidad de regir el propio destino.


Esta exposición tiene un montaje interactivo en el que, partiendo de la excusa del hallazgo de la caja secreta, se abre al público el universo de la pequeña Snowhite. Los personajes adquieren formas tridimensionales a través de juegos artísticos de mecanismos tradicionales y sencillos que retoman los elementos ópticos, cinéticos, trampantojos o artificios del pasado. Juegos tradicionales que permiten llevar muy lejos nuestra imaginación.

Ana Juan (Valencia, 1961) inició su carrera ilustrando revistas que caracterizaron la época de la transición, como Madriz, La Luna o El Víbora. Más tarde empezó a colaborar con los periódicos nacionales El País y El Mundo, y con publicaciones internacionales como Elle, Woman, Time Magazine o Boston Globe. Además, ha publicado numerosos libros ilustrados como Snowhite, Demeter y Wackfield convirtiéndose en un referente en el mundo de la ilustración. Hoy es colaboradora de The New Yorker para el que ha ilustrado múltiples portadas, siendo la última en memoria de las víctimas del 11-S en su décimo aniversario. Ha sido galardonada con innumerables premios en el mundo de la ilustración y el diseño gráfico, entre los que podemos citar el Premio Nacional de Ilustración en 2010 o la medalla de oro de la Society of Newspaper Design.

sábado, 15 de octubre de 2011

15-O OTRO MUNDO ES POSIBLE



Las marchas que hoy han recorrido las calles del mundo, para que las personas podamos recuperar la DIGNIDAD que nos han usurpado el poder político y financiero, han contado con el apoyo de intelectuales como Naomi Klein, Vandana Shiva, Noam Chomsky y Eduardo Galeano.

Un gobierno global del pueblo y para el pueblo ha sido reclamado por miles y miles de gargantas.

Aquí tenéis el manifiesto que transcribo del diario Público.

El manifiesto

El 15 de octubre, unidos y unidas en nuestra diversidad por un cambio global, exigimos democracia global: un gobierno global del pueblo y para el pueblo. Inspirados en nuestros hermanos y hermanas en Túnez, Egipto, Libia, Siria, Bahrain, Palestina-Israel, España, Chile y Grecia, también exigimos un cambio de régimen: un cambio de régimen global. En las palabras de Vandana Shiva, la activista india, exigimos el remplazo del G8 por la humanidad completa- el G7,000,000,000.

Las instituciones internacionales no democráticas son nuestro Mubarak global, nuestro Assad mundial, nuestro Gaddafi internacional. Estas incluyen: el FMI, OMC, el comercio internacional, los bancos multinacionales, el G8/G20 y el Consejo de Seguridad de la ONU. Como Mubarak y Assad, no permitiremos que dirijan nuestras vidas sin nuestro consentimiento. Todos nacimos iguales, pobre o rico, mujer o hombre. Africanos y Asiáticos son iguales a Europeos y Americanos. Nuestras instituciones deben reflejar esto o ser derrocadas.

Hoy, más que nunca, fuerzas globales determinan nuestras vidas. Nuestros trabajos, nuestra salud, nuestra vivienda, nuestra educación y nuestras pensiones están controladas por los bancos internacionales, el mercado, los paraísos fiscales, las corporaciones y las crisis financieras. Nuestro medio ambiente está siendo destruido por contaminación en otros continentes. Nuestra seguridad la determinan las guerras y el comercio de armas, drogas y recursos naturales que benefician a personas fuera de nuestras fronteras. Estamos perdiendo el control sobre nuestras vidas. Esto debe terminar. Esto va a terminar. Los ciudadanos del mundo debemos recuperar el control sobre las decisiones que nos afectan a todos los niveles – de global a local. Esto es democracia global. Esto es lo que hoy exigimos.

Como los zapatistas mexicanos, hoy decimos “¡Ya basta! Aquí el pueblo manda y el gobierno obedece” - ¡Ya basta! Aquí el pueblo manda y las instituciones globales obedecen. Como los indignados españoles decimos “¡Democracia real ya!”- Democracia global real ya.

Hoy hacemos un llamado a los ciudadanos del mundo: ¡Globalicemos la Plaza Tahrir! ¡Globalicemos la Puerta del Sol!

domingo, 9 de octubre de 2011

MUJERES EN PIE DE PAZ


TAWAKUL KARMAN: La PAZ como COMPROMISO Y LUCHA.

El siguiente texto, firmado por Yamal Yubran, ha sido traducido del árabe por Alma Allende para Rebelión.

Ni un solo día fue normal la vida de Tawakul Karman. La activista y periodista yemení a la que se concedió hace dos días el premio Nobel de la Paz (junto a la presidenta liberiana Ellen Johnson-Sirleaf y la activista Lima Gbowee) no tiene todavía 32 años y, no obstante esto, ha conseguido convertirse ya en un icono de la mujer militante en su país. No ha dejado de luchar por obtener para las mujeres yemeníes una posición mejor en la vida pública, al mismo tiempo que alzaba públicamente la bandera de la libertad de expresión, rechazando toda clase de restricciones a la prensa y a los medios de comunicación.

Pero Karman, al contrario que muchos otros, no se conformó con teorizar en el ámbito de los derechos, la política y el periodismo sino que trabajó directamente sobre el terreno, fundando la organización Periodistas sin Cadenas y exponiéndose a golpes y malos tratos, tanto físicos como psicológicos, durante su participación en las marchas de protesta que organizó con los jóvenes de la revolución yemení. Asimismo esta mujer rebelde fue secuestrada cuando volvía a su casa en compañía de su marido pocos días después del estallido de las primeras protestas populares. Miembros de la policía del régimen de Ali Abdala Saleh la retuvieron en la prisión central durante treinta horas antes de liberarla bajo una presión internacional y popular sin precedentes. Las cosas no acabaron ahí, pues el propio presidente Ali Saleh le dijo a su hermano en una comunicación telefónica que “el gobierno no se hacía responsable a partir de ahora de lo que pudiera pasarle a Tawakul Karman”, en lo que puede describirse como una velada amenaza de muerte. La activista yemení así lo declaró a los medios de comunicación sin que se produjera ningún desmentido oficial por parte del régimen.

Dice Tawakul, formada en el seno de uno de los partidos religiosos más fuertes del Yemen, Partido de la Alianza Yemení por la Reforma, que supo desde el principio que su camino nunca sería fácil, decidida como estaba a oponerse al régimen militar y policial de Ali Abdala Saleh. Ha declarado que siempre temió lo peor. Pero que ninguna amenaza ni intimidación lograron nunca desviarla del destino que había escogido para sí misma.

En todas sus intervenciones públicas, esta joven yemení repetía siempre su expresión favorita: “para que el ser humano obtenga sus derechos tiene que reclamarlos”. A partir de este principio, alzó públicamente su voz en protesta contra la represión y la injusticia a la que estaba sometido su pueblo. Así creó La Plaza de la Libertad frente a la sede central del consejo de ministros yemení. Pero tras tres años de protestas en esta Plaza, nació otra Plaza, la Plaza de Taghir que ocupan los jóvenes yemeníes desde hace siete meses exigiendo el derrocamiento del régimen de Saleh.

Al-Akhbar contactó con Tawakul Karman nada más conocer la noticia de la concesión del premio Nobel de la Paz. Karman ha querido dedicar el premio a ese impresionante grupo minoritario que la ha acompañado desde el año 2007 y con el que “hemos venido ejerciendo nuestro derecho a defender la libertad de expresión y a protestar contra la represión y el encarcelamiento arbitario al margen de la ley”. Ha añadido que no esperaba en absoluto este premio: “ni siquiera sabía que había sido propuesta, pero no puedo ocultar mi enorme satisfacción y felicidad”. Ha asegurado que el Nobel de la Paz confirma que la lucha pacífica es el mejor camino para “alcanzar nuestros derechos en el enfrentamiento con los regímenes dictatoriales”. El premio obtenido, añade Karman, es un homenaje a los mártires y heridos de la revolución de los jóvenes yemeníes y un reconocimiento internacional de la justicia de esta revolución y de la necesidad de su triunfo”. Y concluye con confianza y alegría que “el premio confirma el poder de nuestro movimiento en su propósito de hacer caer el régimen del presidente Ali Saleh, el cual impide desde hace 33 años la construcción de un Yemen moderno y democrático”.

Tawakul Karman, tras dedicar su premio a los mártires de la revolución y a “los jóvenes de la primavera árabe”, no olvida a los más próximos, a todos aquellos que la han apoyado desde muy cerca, y entre ellos “no puedo olvidar a mi padre, a mi marido y a mi familia, pues sin ellos jamás habría conseguido llegar hasta aquí”.

MARCHA A MADRID